Tesla Motors presentó en Estados Unidos su más reciente novedad, el Model X, un SUV de llamativo estilo que es dueño de un amplio abanico de características que lo hacen muy especial.
Como buen Tesla, cuenta con una mecánica completamente eléctrica que en este caso está compuesta por dos motores, uno ubicado en el eje delantero y para esas ruedas, y otro que hace lo propio en el posterior, por lo que cuenta con tracción integral.
Una de las versiones que se ofrece en Estados Unidos es la 90D, equipada con un motor eléctrico delantero con 263 caballos y uno trasero con idéntica potencia, conjunto con el que llega a los 100 km/h desde parado en poco más de 4,8 segundos, además de contar con una velocidad final de 250 km/h y una autonomía de 414 kilómetros con cada recarga.
La versión P90D redobla la apuesta con un motor delantero de 263 CV y uno trasero con 510 caballos, además de ofrecer una autonomía de 402 kilómetros, una aceleración de 0 a 100 km/h de unos 3,2 segundos y la misma velocidad máxima.
Otra de las características de este Tesla es la estética, la cual cuenta con el estilo al que nos tiene acostumbrados la marca, pero aplicado a un nuevo concepto, ya que según la marca se trata de un SUV. Además, se luce con su bajo coeficiente aerodinámico de apenas 0,24 y con su alerón trasero activo, con tres posiciones en función de la velocidad.
El interior cuenta con seis o siete asientos (los de la segunda fila poseen accionamiento eléctrico) y un techo de cristal de generoso tamaño, al mismo tiempo que el equipamiento incluye frenada autónoma que también funciona a alta velocidad.
Las puertas traseras Falcon wings o alas de halcón se llevan todas las miradas, ya que se abren hacia arriba. Asimismo, cuentan con un sistema con el que pueden “extender sus alas” aún en espacio estrechos.
Tesla ya acepta reservas y las primeras entregas comenzarán el año que viene. ¿El precio? 132.000 dólares para la versión más accesible…