Según estudios llevados a cabo en por Bridgestone para su campaña social “Por una Conducción + Ecológica”, manejar con una presión de inflado por debajo de la recomendada por el fabricante del vehículo, hace que el neumático se vea forzado a desempeñarse en condiciones fuera de las cuales se encuentra diseñado, y por ello su desempeño se puede ver gravemente perjudicado.
Los efectos sobre el medio ambiente
La presión de inflado también tiene una gran influencia en la resistencia al rodamiento de un neumático y esto es un factor determinante en el consumo de combustible de un vehículo. Dependiendo del tipo de camino y del estilo de manejo, la resistencia al rodamiento representa entre un 18% y un 26% de la energía consumida por un vehículo. Debido a que la baja presión de inflado incrementa la resistencia al rodamiento, esto tiene un efecto directo en el consumo de combustible y en la emisión de gases contaminantes, que afectan directamente al medio ambiente.
¿Cómo ayudar a preservar el medio ambiente?
Bridgestone presenta 10 puntos importantes que cualquier automovilista debe considerar antes de iniciar su conducción:
o Comprar productos ecológicos.
o Planificar el viaje.
o Comprobar frecuentemente la presión de los neumáticos.
o Reducir las cargas innecesarias y evitar el uso de portaequipajes.
o No calentar el motor del auto antes de empezar a conducir.
o Usar el aire acondicionado solamente cuando sea necesario.
o Acelerar suavemente y mantener siempre una velocidad constante.
o Usar el frenado del motor.
o No mantener el motor encendido cuando el auto esté parado.
o Compensar las emisiones de CO2 que se generan.
Otras tendencias green
También se puede ayudar al medio ambiente adquiriendo nuevos hábitos, como por ejemplo utilizando la bici-senda o haciendo carpooling para ir a trabajar.
El uso de la bicicleta es una tendencia que crece cada vez más en los países de Latinoamérica y que, no sólo es bueno para el medio ambiente, sino que ayuda a las personas a mantenerse saludables.
El carpooling, en cambio, es la práctica que consiste en que diversas personas compartan un mismo auto tanto para viajes periódicos como para trayectos puntuales. Dicha tendencia green tiene beneficios múltiples para la sociedad: se reducen las emisiones de CO2, la contaminación atmosférica, visual y auditiva. Además, habrá menos demoras o embotellamientos, lo que beneficiará a todos los automovilistas. Si se adquiere este hábito, no sólo se estará cuidando al medio ambiente, sino también a la propia economía.