En el Mega Operativo entrevistamos a Rodrigo Picerni, Presidente del Club del Ford Fiesta en Argentina, un apasionado por el modelo, que obviamente ya tiene su Kinetic Design.

Mega Autos Digital ¿Cómo nace tu pasión por el óvalo?
Rodrigo Picerni: Me la fue inculcando mi papá cuando desde chiquito, le apasionaba el turismo carretera, hinchaba por Ford, tuvo dos o tres Falcon, Taunus y Escort. Después a los 18 años tuve la oportunidad de comprar mi primer auto y justamente fue un Ford. Arranqué con un Fiesta, seguí con otro Fiesta y actualmente tengo un Fiesta.

MAD: ¿Con cuál modelo arrancaste?
RP: Con el segundo que llegó al país que se conoce como “el brasileño”, el de línea redondeada, un modelo 97, de los primeros Diesel chicos de Ford. Ese era LX base, no tenía ni aire, y también fue mi primera experiencia con un gasolero. Después pude saltar al modelo 2004, también Diesel, pero con turbo y Full. El primero fue 0 km, el segundo usado y después vino el 3º que fue cero, un Max 2009, mi primer auto con baúl y naftero. Mi cuarto Fiesta es el de mi señora y el 5º, que es mío, es el Kinetic Design.

MAD: ¿Qué recuerdos tenés de tu primer Fiesta?
RP: No solo fue mi primer auto, también fue mi auto escuela, recién me lanzaba a la calle a manejar y se comió todo mi aprendizaje. Después, todas las ideas que se me pasaban por la cabeza las sufría el auto. Ese Fiesta lo tuve como 250.000 km, se bancó mi era tuning, de la que ahora me siento un poco arrepentido porque le hice cada cosas, como pintarle el interior con colores raros, spoilers, llantas, etc. Pobre auto sufrió un manoseo importante, pero tengo recuerdos muy buenos porque hice un montón de viajes, además fue mi paso de entrada al Club.

MAD: ¿Cómo entraste al Club?
RP: Yo al Club lo heredé. Lo formó Ariel Montero, pero le robaron el auto, así que decidió no seguir y yo me ofrecí para hacerme cargo. Así arranqué con el Club en octubre de 2002.

MAD: ¿Cuáles son los recuerdos de tu segundo Fiesta?
RP: Ahí ya me calmé con la onda tuning, lo mantuve original, apenas le cambié dos o tres cositas como llantas. Lo tuve como 40.000 km, hice mis viajes, casi sin ningún problema, hasta que decidí probar con una versión con baúl. Apuntaba a la familia y me llamó la atención el Max, con su amplitud.

MAD: ¿Cómo saltaste al Kinetic Design?
RP: Lo venía siguiendo hacía dos años cuando pude viajar a Europa por trabajo y lo vi en la calle.

MAD: ¿Nunca se te ocurrió saltar a un Focus?
RP: Lo pensé porque mi señora tiene otro Fiesta y e Focus siempre me gustó. Si algún día puedo lo tendría como segundo auto (risas).

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