Presentado por primera vez en el año 2013, el Ford Focus argentino es una de las dos plataformas globales que la marca del óvalo fabrica en la planta de Pacheco, donde también hace la Ranger. Recientemente anunció una inversión de 220 millones de dólares para la renovación de ambos modelos.
El Focus fue el primero en recibir su primer restyling, el mismo que está siendo exhibido en el Salón de Buenos Aires, y que ahora dio un nuevo paso hacia su comercialización con una presentación llevada a cabo en Brasil y dedicada al mercado local, donde se venderá desde el mes próximo.
Como anticipamos desde la muestra porteña, el modelo incorporó un nueva estética que sigue las pautas de la evolución del Kinetic Design, la corriente de diseño que representa al óvalo en todo el mundo, y que en Argentina también puede ser encontrada en el Fiesta y el Mondeo.
Es así que lo más novedoso está en el frontal del vehículo, con ópticas alargadas y una parrilla hexagonal que se lleva el protagonismo principal. El paragolpes cuenta con nuevos faros antiniebla rectangulares, mientras que las llantas son todas nuevas y hay varios modelos de acuerdo a los diferentes niveles de equipamiento. Atrás hay nuevas líneas tanto en la carrocería como en las ópticas.
Y si nos referimos al equipamiento, la principal novedad del Focus es el Active City Stop, un dispositivo que cuenta con sensores que escanean el camino y, en caso de riesgo de colisión, activa los frenos automáticamente con el objetivo de reducir o evitar el choque. Su rango de funcionamiento es hasta los 50 Km/h.
La innovación también llegó a la iluminación, ya que el modelo estrena nuevas ópticas con luces bixenón direccionales y adaptativas, las cuales se asocian con luces diurnas con tecnología LED. Entre sus bondades, se destacan por ofrecer el doble de potencia que las luces convencionales.
Otra de las incorporaciones es el Sistema de Asistencia para el Estacionamiento Paralelo y Perpendicular. Como su nombre lo indica, hace la maniobra automática en lugares con ambas características, mientras que el sistema Pull Out realiza la maniobra de abandono del espacio en forma automática y paralela. Las indicaciones del sistema se siguen por medio dela pantalla del SYNC.
Estos nuevos dispositivos pueden ser encontrados en la variante Titanium (también están las S, SE y SE Plus), que además incluye seis airbags, ABS, EBD y EBA, control electrónico de estabilidad (ESC) y de tracción (TCS), asistencia al arranque en pendientes (HLA), anclajes Isofix y detección de baja presión de neumáticos.
Pero no es lo único que trae el Focus full, que además tiene SYNC MyFord Touch con pantalla de 8 pulgadas, llantas de aleación de 17 pulgadas, arranque por botón, acceso manos libres y cámara trasera.
En el plano mecánico, la única modificación se encuentra en la caja automática PowerShift, la cual posee sistema de doble embrague robotizado y seis cambios con una opción manual que ahora se puede comandar desde el volante por medio de las nuevas levas para el manejo secuencial.
No hubo cambios en los motores, que son dos nafteros. Hay un 1.6 TiVCT de la familia Sigma que ofrece una potencia de 125 CV, mientras que el más potente es el 2.0 Duratec GDI, que recurre a la inyección directa de combustible y dispone de 170 CV.
Como es habitual en la gama del mediano nacional, las carrocerías son una de dos volúmenes con cinco puertas y otra sedán que se destaca por ofrecer una mayor capacidad de baúl (421 contra 316 litros).
Los precios del nuevo Focus serán comunicados la semana que viene, cuando también tendría lugar la renovación de las bases del impuesto interno a los autos, cuya primera escala posee como tope un precio público de 275 mil pesos.