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jueves , 21 de Noviembre de 2024
McLaren, una marca que también es reconocida por su presencia en la Fórmula 1, reveló hoy en Europa su nuevo superdeportivo denominado 570S Coupé, que se suma a los espectaculares P1 y 650S de la casa.
Este deportivo cuenta, en primer lugar, con la presencia del conocido motor naftero V8 3.8, un bloque que para la ocasión entrega 570 CV de potencia máxima y un par motor de 600 Nm, cifras que en parte son obtenidas gracias al doble turbocompresor. Además, se ubica en posición central trasera y cuenta con el 30% de sus piezas de nueva concepción.
Conforma una interesante dupla con una caja automática con doble embrague, siete marchas y levas al volante que es accionada por medio de una botonera entre los asientos. A su vez, ésta se combina con la tracción en el eje posterior, lo que completa un conjunto que promete. ¿Las prestaciones? Acelera de 0 a 100 km/h en 3,2 segundos y llega a los 328 km/h de velocidad máxima.
Llegamos al rubro estético, donde nos encontramos con un diseño que arranca miradas ya desde su sector frontal, donde hay ópticas redondeadas que se empalman con los extremos del paragolpes. Dicho recurso se combina con un techo bien curvo y con las entradas de aire laterales, que están señalizadas con una segunda tonalidad.
La parte trasera no es menos importante. Sus ópticas delgadas le aportan dinámica y carácter, algo que también queda acentuado con el generoso difusor de aire y con las salidas de escape en cada extremo del mismo.
La imagen sport del exterior se traslada a la cabina, espacio en el que McLaren ostenta un buen diseño, simple y con todo lo que hace: la pantalla digital como central multimedia, las levas de la caja y los asientos deportivos, además de varias opciones de personalización. Hay lugar para sólo dos personas, mientras que entre el equipamiento se destaca el sistema de navegación, las luces de LED, los amortiguadores electrónicos, etc.
En el 570S también es característica la profusión de la fibra de carbono, un material que está presente tanto en el chasis monocasco (pesa menos de 80 kilos) como en los frenos cerámicos y en distintas piezas de la carrocería y el habitáculo. Esto hace que acuse un peso de sólo 1.300 kilos (en seco) cuando pasa por la balanza.
