Es el Yogomo 330, un modelo eléctrico de pequeñas dimensiones que utiliza el diseño de la nueva generación del pequeñin surcoreano. La diferencia está en el interior y en la mecánica, del tipo eléctrica.

El tema no es nuevo. Como la ley de su país no lo prohíbe, algunas automotrices chinas toman “prestado” los diseños de modelos conocidos. Sobran los casos que lo demuestran, y hoy se suma uno más, el del Kia Picanto.

En esta oportunidad, la irresponsabilidad -y el ahorro en los costos de desarrollo- llegan a tal punto que el modelo de Yogomo posee una carrocería que copia cada trazo del modelo de la marca surcoreana.

De esta forma, es reconocido por las caracerísticas líneas del modelo del segmento A (a la venta en Argentina), un estilo que dice presente tanto en el frontal como en los paneles laterales y la zona trasera. A pesar del plagio, posee una longitud menor, con 3,45 metros en lugar de los 3,59 del Picanto.

Sin embargo, los chinos tuvieron un poco de consideración al momento de configurar el habitáculo, que cuenta con un diseño alejado del que posee el Picanto. El equipamiento, por su parte, ofrece elementos como levantavidrios y cierre de puertas eléctricos, aire acondicionado, dirección asistida y pantalla color.

Mientras que el Kia Picanto se caracteriza por ofrecer motores nafteros de baja cilindrada, el Yogomo da la nota con una motorización eléctrica que entrega una potencia máxima de 13 KW, lo que se traduce en unos 18 caballos.

Según los primeros datos aportados por la firma china, el 330 cuenta con dos opciones de batería: una de plomo-ácido y otra de iones de litio. En su página oficial indica, asimismo, que puede alcanzar una velocidad de 60 km/h y recorrer 160 kilómetros antes de la recarga.

Otros casos conocidos de plagios chinos de autos famosos son los de Amarok, Tiguan y Touareg de Volkswagen, Peugeot 107, Citroën C1, Range Rover Evoque, BMW X5 y Mercedes-Benz CLK, por citar sólo algunos.