Renault Argentina confirmó hoy el inicio de la producción de la pick up mediana Alaskan en la Fábrica Santa Isabel de Córdoba. La noticia llega como una bocanada de aire fresco para la industria automotriz local, que en abril de este año tuvo una producción nula de vehículos, producto de la cuarentena obligatoria decretada por el gobierno.
Este hito es el resultado de la colaboración de todos los sectores interesados en el proyecto como socios, proveedores, concesionarios, colaboradores y sindicato, afirmaron desde la compañía, que también fijó el inicio de la fabricación para fines de 2020.
Con la incorporación de la pick up Alaskan, suman 5 los modelos que se fabricarán en Santa Isabel: Kangoo, en sus versiones de pasajeros y utilitario, y la renovada gama de Sandero, Logan y Stepway lanzada en noviembre de 2019.
La camioneta del Rombo llegará para complementar la oferta en el segmento de vehículos utilitarios en la que Renault se ha destacado, liderando varios subsegmentos con productos como Duster Oroch, Master, Kangoo y con el primer vehículo eléctrico lanzado en el país, el utilitario Kangoo ZE.
“Nuestra Fábrica Santa Isabel en Córdoba se va a convertir en referente de la producción regional de Vehículos Comerciales Livianos. Este es el perfil que hemos definido para este centro industrial que en 2020 cumple 65 años ininterrumpidos de trabajo. Vamos por otros 65 años más de éxitos, confirmando una vez más la apuesta de Renault al desarrollo industrial del país”, dijo Pablo Sibilla, Presidente y Director General de Renault Argentina.
La Alaskan forma parte de un proyecto que demandó 600 millones de dólares de inversión de la Alianza Renault-Nissan y Daimler para fabricar tres pick ups en Santa Isabel. La primera en salir de la línea de montaje fue la Nissan Frontier en 2018. La pick-up de Renault estaba prevista para ese mismo año, pero el inicio de su producción se fue demorando. La tercera camioneta, la Clase X de Mercedes-Benz, en tanto, fue finalmente cancelada.
La chata de Renault es un producto derivado del prototipo que lleva el mismo nombre y desarrollado a partir de la generación actual de la Nissan Frontier, con la que comparte el chasis de largueros y la suspensión trasera con eje rígido y sistema Multilink con cinco brazos. De esta manera, puede cargar más de una tonelada y remolcar hasta 3,5 toneladas.
El motor anunciado oportunamente es un diésel 2.3 dCi de Renault que también utiliza la Master. Tiene cuatro cilindros, doble turbo y dos niveles de potencia: 160 y 190 caballos, mientras que las cajas son manual con seis velocidades y automática con siete relaciones. La tracción es trasera ó 4×4 electrónica con reductora y bloqueo de diferencial. En algunos mercados también habrá un impulsor naftero 2.5 con 160 caballos.