Latin NCAP, el programa encargado de evaluar la seguridad de los vehículos comercializados en América Latina y el Caribe, puso a prueba el Renault Kwid, el flamante modelo urbano producido en Brasil.
A punto de ser lanzado en Argentina (ya es ofrecido con una preventa), el modelo del Rombo logró una calificación de tres estrellas para el cuidado del pasajero adulto, además de alcanzar las tres estrellas en la protección del pasajero niño.
La clave del hatchback del segmento A está en la construcción, lo que le permite ser más seguro que el modelo producido en India. En ese sentido, cuenta con refuerzos estructurales adicionales como las barras laterales en las cuatro puertas.
El modelo fue objeto de pruebas de choque de impacto frontal y de impacto lateral. En la protección de adultos, ofreció una protección frontal adecuada y una marginal en los choques laterales, prueba en la que demostró una protección débil del pecho.
El programa también anunció que la combinación de la estructura de impacto lateral con el airbag de tórax lateral (de serie en toda la gama), evita lesiones de alta probabilidad de riesgo de vida.
En cuanto a los niños, el modelo ofreció un cuidado adecuado en la prueba de choque frontal y una protección buena en las pruebas laterales. En ese aspecto, cuenta con anclajes Isofix para sillas infantiles. Los faltantes son la desconexión del airbag frontal del pasajero (para colocar una silla en la parte delantera) y el quinto cinturón inercial.