Renault lanzó en Brasil el Kwid regional, modelo que representa la nueva apuesta de la marca francesa para la región, donde es presentado como un “SUV compacto urbano”.
Una de los sellos del modelo brasileño es su estética exterior, asociada a la imagen de un todo terreno, estilo que es conseguido gracias a los plásticos negros presentes en los paragolpes y los pasarruedas y al generoso despeje -de 180 milímetros- de la carrocería respecto del suelo.
Con la plataforma CMF-A (de la Alianza Renault-Nissan) como base, el Kwid posee un habitáculo configurado para cinco personas y un baúl cuya capacidad varía entre 290 y 1.100 litros. Además, posee un peso de apenas 758 kilogramos.
Si nos referimos al motor, la única opción de la gama es el 1.0 SCe (Smart Control Efficiency), un naftero tricilíndrico con 12 válvulas que entrega una potencia de 66 caballos (con etanol asciende hasta los 70 CV) y un torque de 9,4 kgm (9,8).
Se combina con una nueva caja manual con cinco velocidades y la tracción delantera. Para ese conjunto, la marca del Rombo anuncia un consumo de combustible de 14,9 km/l en ciudad y de 15,6 km/l en ruta.
Los niveles de equipamiento para Brasil son tres. El primero es el Life e incluye airbags frontales y laterales delanteros, llantas de acero de 14 pulgadas, anclajes Isofix, instalación para radio y aviso de cambio de marchas.
El Zen suma dirección eléctrica, aire acondicionado, trabas y levantavidrios eléctricos y radio con Bluetooth y entradas USB y AUX.
Por su parte, la versión Intense además cuenta con detalles de terminación exclusivos, espejos eléctricos, luces antiniebla, apertura eléctrica del baúl, sistema Media Nav y cámara trasera.
Ahora hay que esperar hasta el último trimestre del año, época en la que se concretará el arribo del modelo a Argentina, donde tuvo lugar su presentación regional en el Salón de Buenos Aires.