Desde París – Hyundai presentó en el Salón de París el RN30, un prototipo con el que anticipa su gama de alto rendimiento “N”, modelos que se distinguirán por su propuesta deportiva, tanto en estética como en mecánica.
Nacido como un auto de carreras, fue desarrollado a partir de la nueva generación del Hyundai i30 entre Hyundai Motorsport (HMSG), el Centro Técnico de Hyundai Motor Europa (HMETC) y la división de vehículos de alto rendimiento de Hyundai Motor.
El prototipo, que “pronto” se convertirá en el primer modelo N de la firma coreana, llama la atención por su diseño aerodinámico y agresivo, basado en el nuevo hatchback del segmento C y con muchas novedades.
Entre las nuevas características se incluyen los generosos paragolpes, zócalos y spoilers, las entradas de aire, el ancho ampliado 30 milímetros, las vistosas llantas de aleación de 19” y el alerón en la zona trasera, donde además hay una doble salida de escape central.
Sin embargo, lo más importante de este bicuerpo es la mecánica, compuesta en primer lugar por un motor naftero 2.0 con turbocompresor, específico para modelos de producción de la línea N. Genera 380 caballos de potencia y 451 Nm de torque.
El propulsor se combina con una caja automática con doble embrague (DCT) en baño de aceite, que anticipa una “respuesta más rápida durante el cambio”, y con un sistema de tracción en las cuatro ruedas (AWD) que incluyendo un diferencial de deslizamiento limitado controlado electrónicamente.
Otra de las novedades es un sistema que ofrece un modo deportivo, el cual regula y adapta el régimen del motor cuando se realizan los cambios. Se combina con un sistema de escape con sonido variable electrónico.
Con el objetivo de reducir el peso, la marca ha utilizado materiales plásticos de alto rendimiento, que son completamente nuevos. Además, en el interior deportivo se eliminaron componentes y se cambiaron la ubicación de otros, para reducir el centro de gravedad.