Con un desempeño que fue de menor a mayor, Stéphane Peterhansel consiguió su sexto triunfo en la categoría coches, igualando el número de victorias en la categoría motos. De esta manera, con sus 12 títulos, “Monsieur Dakar” agiganta su leyenda en el mítico rally.
Esta nueva victoria se construyó con mucha paciencia y con toda la experiencia del piloto galo, que supo esquivar los problemas durante toda la competencia, lo que le permitió trepar hasta la punta luego del accidente de Sébastien Loeb (9no) y las dificultades mecánicas de Carlos Sainz (abandonó).
A Peterhansel no le alcanzan las manos para contar sus victorias en el Dakar.
En segunda posición quedó Nasser Al Attiyah, que con su Mini se mantuvo siempre al acecho de los Peugeot. Tercero se ubicó Giniel De Villiers con su Toyota, un coche muy confiable, pero al que le faltó velocidad en relación a sus rivales, en palabras del mismo De Villiers.
La mega estrella del automovilismo Sébastien Loeb, fue sin dudas la gran atracción de esta edición del Dakar. Si bien tuvo un espectacular vuelco que lo dejó fuera competencia, completó la prueba con cuatro victorias de etapa y con ganas de revancha para el año próximo.
Así quedó el Peugeot 2008 DKR luego del espectacular vuelco en la etapa 8 que unió Salta con Belén.
En motos, el australiano Toby Price, tercero el año pasado en su primera participación, se adjudicó la victoria, la primera para un australiano. Detrás de él llegó Stefan Svitko (también KTM), mientras que Pablo Quintanilla completó el podio.
Toby Price, Stefan Svitco y Pablo Quintanilla, el podio en motos.
En su regreso al Dakar, los hermanos Patronelli han demostrado nuevamente su supremacía. Marcos, resultó ganador por tercera vez y Alejandro, quedó segundo con una amplia diferencia sobre el tercero, Brian Baragwanath, que sube al podio en su segunda participación.
Los hermanos Patronelli, imbatibles.
En la categoría camiones, Gerard De Rooy alcanzó su segundo título al volante de su Iveco, por delante de Airat Mardeev, ganador en 2015, y de Federico Villagra, piloto argentino, nuevo en la categoría tras correr el Dakar dos veces en la categoría coches.
Al final, 84 motos, 23 quads, 67 coches y 44 camiones logran terminar los 9.500 kilómetros de carrera, de los 358 competidores que arrancaron la competencia, es decir, más de un 60%, en esta 38ª edición.
Nasser Al Attiyah, segundo con su Mini