En el Salón de Ginebra Porsche dio a conocer una nueva versión de su legendario 911. Se trata del GT3 RS, una evolución del GT3 convencional que se pondrá a la venta en Europa en los próximos meses.
En primer lugar se destaca por contar con una carrocería más ancha que la del GT3 normal, y por su estética diseñada especialmente para la ocasión. Así, dispone de nuevos paragolpes y generosas entradas de aire en los guardabarros delanteros, las cuales se encargan de incrementar la carga aerodinámica.
También cuenta con llantas de aleación específicas en color oscuro, pinzas de freno en tonalidad amarilla, generoso alerón fijo en la parte trasera y doble salida de escape central. Dichas piezas redondean una estética agresiva, que le quita el sueño a más de uno.
Otras de las particularidades de este Porsche es que posee tanto el capó como la tapa del baúl construidas con fibra de carbono, al mismo tiempo que el techo está realizado en magnesio. De esta forma, pesa 10 kilos menos que el GT3.
En el habitáculo puede ofrecer jaula antivuelco, un cinturón de seguridad de seis puntos, asientos deportivos de fibra de carbono y tapizados con Alcántara y cronómetro en el panel de a bordo, además de una tonalidad roja que se hace presente en butacas, paneles de puerta y volante.
Pero lo más impresionante del RS es la ficha técnica, compuesta por un motor 4.0 bóxer (seis cilindros opuestos) atmosférico que entrega una potencia de 500 caballos, 25 CV más que lo que ofrece el GT3 convencional.
La transmisión, por su parte, es la automática denominada PDK, con sistema de doble embrague y siete velocidades, mientras que la tracción corre por cuenta de las ruedas posteriores.
Con ese trío, el 911 GT3 RS acelera desde parado hasta los 100 km/h en un tiempo de apenas 3,3 segundos (el GT3 lo hace en 3,5), y hasta los 200 km/h en 10,9 s. La velocidad máxima es de 310 km/h, y el consumo promedio de 12,7 litros cada 100 kilómetros.
Porsche 911 GT3 RS junto al Cayman GT4.