Con nombre conocido, el inédito crossover compacto posee un estilo exterior asociado al del Kuga, baúl con 456 litros y motorización híbrida que incluye el motor EcoBoost con tres cilindros.

Ford continúa agrandando su gama de SUVs, segmento que representa uno de cada cinco de sus vehículos comercializados en Europa, donde registraron un incremento del 19% en 2018. Ahora, la novedad es el nuevo Puma (el nombre de un coupé del Óvalo surgido en la década del 90), un inédito crossover para el segmento compacto.

La primera imagen oficial permite conocer los primeros detalles estéticos del exterior, en el que abundan las formas redondeadas, con un look que recuerda a la nueva generación de Kuga.

Algunos de los detalles que llaman la atención son las ópticas con líneas suaves y luces LED diurnas, la clásica parrilla de los nuevos modelos de la marca y las líneas también suaves de los laterales, donde las llantas de aleación le permiten lucir cierto estilo deportivo.

Por otro lado, tanto la parte posterior de la carrocería como el interior deberían contar con un estilo también vinculado a modelos como los nuevos Kuga, Focus y Fiesta producidos y comercializados en Europa.

Puertas adentro, el modelo dispone de una conducción elevada y un baúl con un sistema profundo, versátil (permite acomodar dos bolsas de palos de golf en posición vertical) y con un volumen de 456 litros.

Por su parte, la mecánica tiene como protagonista principal a la tecnología Ford EcoBoost Hybrid, con hasta 155 caballos. Combina el conocido motor naftero EcoBoost 1.0 (tres cilindros y turbo) con el sistema BISG, que cuenta con un motor eléctrico que apoya al térmico (reemplaza y suma torque) y también funciona como motor de arranque, generador y recuperador de electricidad, que es almacenada en una batería de iones de litio de 48 voltios. La marca promete un mayor rendimiento y ahorro de combustible.

El nuevo Ford Puma será producido en la planta de Craiova, en Rumania, y comercializado en Europa desde fines de 2019.