Land Rover presentó en Europa la tercera generación del Range Rover Sport, el SUV de lujo de la marca. Se diferencia del Range Rover, presentado el año pasado, por su propuesta exclusiva.
En el exterior luce un nuevo estilo de diseño en el que se destaca el look deportivo que incluye parrilla, ópticas y paragolpes con un nuevo diseño, parantes y techo de color negro y las grandes llantas de aleación.
En el interior se destaca la presencia de un tablero de instrumentos totalmente digital con un tamaño de 13,7 pulgadas. Está acompañado por una pantalla táctil curva de 13,1 pulgadas destinada al sistema multimedia.
El flamante modelo también incorpora diversas asistencias a la conducción como cámara envolvente 3D y detección de vadeo, además de una mecánica que incluye suspensión neumática, amortiguadores activos, dirección y tracción en las cuatro ruedas y caja automática con ocho velocidades.
Las opciones de motor son diversas. Hay una híbrida enchufable con motor naftero de seis cilindros, propulsor eléctrico de 143 CV y una potencia total de 510 caballos. Además, brinda más de 113 km de autonomía con cero emisiones, la misma de la otra opción híbrida enchufable, que tiene 440 CV.
La gama además está disponible con un naftero V8 con doble turbocompresor que genera 530 caballos y permite una aceleración de 0 a 100 km/h en sólo 4,5 segundos. A eso se suman las opciones nafteras y diésel con seis cilindros y sistema híbrido suave.