Audi continúa sumando nuevos modelos a su gama europea. Hoy el protagonista es el Q3 Sportback, un SUV que se suma a la nueva generación del Q3 y que se destaca por ofrecer una silueta de coupé.
Para lograr el nuevo “cuerpo”, la marca alemana incorporó un nuevo techo con caída más suave en la parte trasera y una altura de 1,56 metros, casi tres centímetros menos respecto del Q3. Se combina con los 4,50 metros de longitud (en lugar de los 4,48) y la misma distancia entre ejes: 2,68 m.
El sector frontal es conocido e incluye una generosa parrilla octogonal con diseño tridimensional, acompañada por las ópticas con luces Matrix LED y el paragolpes con entradas de aire trapezoidales.
En el habitáculo, el nuevo Audi tiene tablero digital de 10,25 pulgadas, cinco plazas, asiento posterior con regulación longitudinal y baúl con 530 a 1.400 litros de volumen (el Q3 ofrece 530 o 675 litros que se extienden hasta los 1.525 l).
El nuevo Q3 Sportback incluye el motor naftero 2.0 TFSI (turbo) con 230 caballos, el turbodiésel 2.0 TDI con 150 CV, la caja automática S tronic con sistema de doble embrague y la tracción integral Quattro. Además, posee control dinámico de conducción (actúa sobre el motor, la caja, la dirección y los amortiguadores) y el control de descenso en pendiente.
Más adelante también contará con una versión con motor naftero combinado con el sistema Mild Hybrid de 48 voltios (reduce hasta 0,4 l/100 km el consumo de combustible) y una opción diésel más potente. La familia además tendrá una caja manual y la tracción en las ruedas delanteras.
El equipamiento de seguridad, por su parte, dispone de aviso de salida involuntaria de carril, frenado automático de emergencia, asistencia de conducción adaptativa (con control longitudinal y lateral del vehículo) y cámara de 360°.