La marca alemana presentó en Europa las versiones de altas prestaciones del Q3 y el Q3 Sportback, con estilo de coupé. Motor naftero con cinco cilindros y turbocompresor, caja automática de siete marchas y tracción integral.

En el mercado europeo, los nuevos Audi Q3 y Q3 Sportback ya tienen sus versiones deportivas RS, el nivel máximo de prestaciones de la marca alemana, que aplicó cambios en el exterior, el habitáculo y la mecánica.

Los SUV perteneciente al segmento C, uno convencional y otro con estilo de coupé, se diferencian fácilmente del resto de las gamas gracias a piezas específicas como la parrilla, los paragolpes, las llantas de aleación de 20 o 21 pulgadas, el spoiler negro brillante, el difusor trasero y las salidas de escape ovaladas.

A lo mencionado anteriormente se suman los pasarruedas con 10 milímetros más de ancho, mientras que la suspensión deportiva reduce 10 mm el despeje respecto del suelo. Si el cliente lo desea, también está disponible la suspensión deportiva con control dinámico.

En el habitáculo de los RS Q3 y RS Q3 Sportback se lucen el volante y los asientos (con apoyacabezas integrados) deportivos, mientras que el equipamiento incluye el selector de modos de manejo, que modifica la respuesta del motor, la dirección, la caja, la suspensión y el sistema de escape.

Por su parte, la mecánica recurre al motor 2.5 TFSI, un naftero con bloque de cinco cilindros y sobrealimentación mediante turbocompresor. Genera 400 caballos de potencia y 480 Nm de torque. Trabaja con la caja automática S tronic con sistema de doble embrague y siete velocidades, mientras que la tracción es integral permanente Quattro.

Con el mencionado conjunto, al que se suma la dirección eléctrica progresiva con ajuste exclusivo y los frenos RS, los Q3 y Q3 Sportback más deportivos pueden acelerar de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos y llegar a los 250 km/h de velocidad máxima limitada o a los 280 km/h, que es un opcional.