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jueves , 26 de Diciembre de 2024
Un longboard eléctrico multifuncional, con 1,05 metros de largo, se integra en el paragolpes trasero del auto, para una cómoda portabilidad y acceso. Para asegurar una permanente posibilidad de uso, el dispositivo carga su batería automáticamente cuando va anclado al vehículo. El diseño de la tabla incluye el uso de materiales como fibra de carbono y aluminio.
El sistema de infotainment del vehículo está conectado al calendario del smartphone del usuario. Basándose en el destino y tiempo de llegada previsto, el sistema calculará la combinación de movilidad más rápida, teniendo en cuenta datos de tránsito en tiempo real. En caso de que la opción de usar el longboard sea el más rápido, el sistema recomendará un estacionamiento cercano, de modo que el conductor continúe su desplazamiento hasta el destino con longboard eléctrico.
La información de navegación se sincroniza con la App Audi MMI connect en el smartphone del usuario, para continuar la guía del trayecto.
El longboard multifuncional tiene una autonomía eléctrica de más de 12 kilómetros, alcanzando una velocidad máxima de 30 km/h. Puede ser utilizado en tres modos: en el denominado “scooter mode”, el teléfono va convenientemente encastrado al manubrio desplegable para mostrar direcciones. La velocidad se ajusta vía un control remoto dispuesto en el puño derecho del manubrio. Una mochila puede sujetarse allí también.
En “sport mode”, el usuario regula la velocidad con un control remoto en su mano. En un tercer modo, el longboard sirve como dispositivo de transporte para equipaje o bolsas de compras. Con conexión inalámbrica a un smartphone o smartwatch, sigue automáticamente a su dueño.
El concept car Audi connected mobility se basa en el Audi Q3, modelo que para clientes chinos se produce localmente. Más de 70.000 unidades se han vendido en este país en 2015, haciendo del Q3 el líder del segmento SUVs compactos premium de ese país.
