Lexus lanzó en Argentina el LC, un coupé derivado del prototipo LF-LC de 2012 y producido en Japón. Llega con una única versión LC 500.
El modelo de la marca de lujo de Toyota posee techo fabricado con fibra de carbono, piezas de aluminio, llantas de aleación de 21 pulgadas, spoiler trasero activo (a 80 km/h) y once opciones de color para la carrocería.
El habitáculo tiene cuatro alternativas de color y cuatro plazas, materiales como Alcantara y aluminio, Head Up Display, pantalla de 10,25 pulgadas con GPS y conectividad con Android Auto y Apple CarPlay y equipo de audio Mark Levinson con trece parlantes.
El equipamiento además incluye asientos delanteros calefaccionados, ventilados y eléctricos (con memoria para el conductor), TV digital, climatizador automático con dos zonas, sistema de modos de conducción, control de velocidad crucero, Easy Access (desplazamiento automático de volante y butaca), freno de estacionamiento eléctrico y volante multifunción con cuero y levas.
En el apartado de la seguridad contiene ocho airbags (frontales, laterales, de cortina y de rodilla para conductor y acompañante), sensor de monitoreo de punto ciego, alerta de tránsito posterior, capot “Pop-Up” para (seguridad del peatón), monitoreo de presión de neumáticos y ópticas delanteras Multi-LED con triple haz, nivelación automática, función cornering y lavafaros.
La mecánica tiene como protagonista principal al motor naftero V8 5.0 aspirado y fabricado a mano. Entrega 477 caballos, 540 Nm de torque y se une con la caja automática con diez marchas Sport Direct-Shift y la tracción trasera. A eso se suma la dirección eléctrica y la suspensión independiente y adaptativa.
El nuevo Lexus LC 500 tiene un precio de 249.900 dólares y una garantía de 5 años o 150.000 kilómetros.