Con cambios en el exterior y el habitáculo, el modelo se destaca por la capota de lona y el motor 2.0 turbo con 258 caballos, junto con una caja automática de nueve velocidades.

El Mercedes-Benz Clase C llegó al mercado argentino, donde es ofrecido a través de la versión C 300. Y con la novedad de un restyling, con cambios tanto en el exterior como en el habitáculo.

Ubicado en el segmento D, donde ya se encuentran el sedán y el Coupé de la Clase C, el nuevo descapotable se diferencia principalmente por la presencia de la capota de lona eléctrica, que permite descubrir el habitáculo con cuatro plazas. Además, tiene paravientos, luneta trasera de cristal y perfil aerodinámico sobre la tapa de baúl.

La presentación exterior combina novedades en el diseño con la línea AMG Line, que cuenta con parrilla con efecto diamante, paragolpes deportivo y llantas de aleación AMG de 18 pulgadas.

Las modificaciones en comparación con las otras versiones continúan en el interior, donde posee un tablero completamente digital, asientos con look deportivo, iluminación ambiental, tapizado similar al cuero de color negro y volante deportivo forrado con napa.

Por su parte, el equipamiento incluye sistema multimedia con pantalla con colores, navegador satelital, Bluetooth y Media Interface (para iPod y USB), Touchpad integrado, climatizador automático con dos zonas, asistencia activa para estacionar, acceso sin llave, encendido de motor con botón, sensor de lluvia, espejos exteriores rebatibles eléctricamente y con calefacción y antideslumbramiento automático, sistema de sonido Advanced, Dynamic Select y control de velocidad crucero con límite variable de velocidad.

El Clase C Cabrio además incorpora controles de estabilidad y de tracción, airbags frontales, laterales delanteros, de cortina y de rodillas para conductor, ABS con asistencia de frenos, luces LED High Performance, luz de freno adaptativa intermitente, neumáticos Run Flat, alarma antirrobo, cámara trasera, advertencia de cansancio del conductor y sistema adaptive brake, que consta de asistencia de arranque en pendientes, función hold, llenado anticipado y función frenos secos.

La mecánica contempla el motor naftero 2.0 con inyección directa, turbocompresor, 258 caballos y 370 Nm, además de contar con el sistema de apagado y encendido automático. La caja, por su parte, es la automática 9G-Tronic con sistema de convertidor de par y nueve velocidades, mientras que la tracción está a cargo de las ruedas traseras.

Según la marca de la estrella, el C 300 Cabrio puede acelerar de 0 a 100 km/h en 6,2 segundos y alcanza los 250 km/h de velocidad, mientras que el consumo combinado es de 6,7 a 7,1 l/100 km.