El hatchback del segmento B llega desde México en tres versiones, dos niveles de equipamiento, todas con un motor naftero con 123 caballos con caja manual o automática.

Kia Argentina lanzó en el mercado local la nueva generación del Rio, su hatchback del segmento B que, como el Cerato arribado el año pasado, es producido en México.

El nuevo modelo posee nueva plataforma que le permitió mejorar el comportamiento dinámico, además de extender la distancia entre ambos ejes -de 2,58 metros- y bajar el centro de gravedad.

La evolución también se encuentra en el diseño de la carrocería con cinco puertas, que cuenta con 4.065 milímetros de longitud, 1.725 de ancho y 1.450 de altura. Por su parte, el nuevo interior posee cinco plazas y un baúl con 325 litros.

El único motor de la gama es el naftero 1.6 con 16 válvulas que entrega 123 caballos a 6.300 rpm y 151 Nm de torque a 4.850 rpm. Se combina con una caja manual o con una automática con función secuencial, ambas con seis marchas.

Los niveles de equipamiento son dos. El más accesible es el EX, que incluye llantas de aleación de 15”, aire acondicionado, asiento de conductor regulable en altura, volante con cuero y comandos de audio y control de velocidad crucero, encendido automático de luces, rueda de auxilio homogénea, dirección eléctrica, palanca de caja con cuero, apoyabrazos central con compartimento y equipo multimedia con pantalla táctil de 7”, Apple CarPlay, Android Auto y entradas AUX y USB.

En cuanto a la seguridad, ofrece frenos con ABS y cuatro discos, doble airbag frontal, Isofix, cinturones de seguridad con pretensores y alarma antirrobo.

A todo lo mencionado, la variante SX suma llantas de aleación de 17”, techo corredizo, climatizador automático bizona con purificador de aire y tapizado de cuero. En seguridad agrega control electrónico de estabilidad, control de estabilidad del vehículo (VSM), airbag laterales y de cortina, luces delanteras halógenas bifuncionales, control de frenado en curvas (CBC), estabilidad en línea recta (SLS), asistencia de arranque en pendiente y sensor de estacionamiento trasero.