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jueves , 26 de Diciembre de 2024
La tercera generación del Kia Rio hizo su debut en el Salón Internacional de Ginebra de 2011. Está disponible en los mercados internacionales en carrocería de tres, cuatro y cinco puertas. Esta última es la que llega a nuestro país, con una motorización naftera de 1.4 litros y 109 CV asociada a una caja manual de 6 velocidades (también se ofrece con una automática de 4 relaciones), y con la cual pudimos tomar contacto.
Desarrollado en el centro de diseño que la marca coreana posee en Rüsselsheim, Alemania, bajo la tutela del célebre Peter Schreyer (aunque sus líneas fueron proyectadas por el diseñador italiano Massimo Frascella, uno de sus colaboradores, también creador de la Sportage), este nuevo Rio se fabrica en Corea del Sur y comparte plataforma con el Hyundai i20, que no se vende en nuestro mercado. La propuesta de Kia, de atractivo diseño, moderno y con aires deportivos, lo han hecho merecedor del Red Dot Award en 2012.
Su frontal se caracteriza por un capot corto, con la parrilla típica de los modelos de la marca, con grupos ópticos integrados y un importante paragolpes en tres dimensiones que aloja los faros auxiliares en sus extremos.
El lateral, con una marcada cintura ascendente, y una escasa superficie vidriada, redondean el clásico look deportivo de una coupé (a pesar que a la Argentina llega sólo con llantas de 15 pulgadas, en lugar de las llamativas de 17″ que en otras latitudes se ofrecen en las versiones más equipadas).
El conjunto trasero, con una luneta de reducidas dimensiones y grupos ópticos importantes, nos recuerda fuertemente al pequeño SUV de la marca, el Sportage.
En cuanto a medidas, este nuevo Rio, con sus 4,045 mts de largo, 1,72 mts de ancho, 1,455 mts de alto y una distancia entre ejes de 2,57 mts ha crecido prácticamente en todas sus cotas: el largo se ha incrementado en 5,5 cms, el ancho en 2,5 cms y la distancia entre ejes también crece en 7 cms, con lo que se asegura mayor espacio y confort interior. Eso si, ahora es apenas más bajo (-1,5 cm). La capacidad del baúl, por su parte, también aumentó hasta los 288 litros.
El diseño es un factor determinante en la elección de un auto, y más aun en los del segmento B en el que participa el Kia Rio. Las marcas lo saben bien y Kia no es una excepción. De hecho, este es un de sus puntos destacados.
Interior
Así como el diseño exterior del Kia Rio puede describirse como dinámico, moderno y deportivo, puertas adentro los adjetivos son otros: se lo ve elegante y sobrio, más aun comparado con otras propuestas del mercado que tienen un diseño más futurista y juvenil. Esto se debe seguramente a que los interiores son obra del estudio de Frankfurt que dirige el francés Olivier Guillaume, con el foco en el mercado europeo.
Si bien no encontramos materiales blandos, la calidad general es elevada y las terminaciones están muy bien logradas. Además, el nuevo Rio es funcional y práctico. Todo está donde tiene que estar, los comandos y las funciones son muy intuitivas y fácil de operar, con botones de grandes dimensiones.
El volante multifunción, revestido en cuero y de buen grip, es muy completo y permite operar de manera ágil las distintas funciones del stereo (con Bluetooth, adaptador para iPod, entrada auxiliar y USB), la computadora de abordo, el teléfono y el control de velocidad crucero.
El tablero de instrumentos, de fácil lectura, consta de tres esferas bien separadas con tacómetro, velocímetro e indicadores de nivel de combustible y temperatura, todos analógicos, y con un display digital en el centro que muestra las funciones de la computadora, que es muy completa.
Dos prácticas salidas de 12v permiten, por ejemplo, cargar el teléfono celular y tener conectado un GPS externo -en Argentina no se ofrece con uno integrado- al mismo tiempo. Además, viene con un adaptador para iPod y entrada USB.
El nuevo Rio es espacioso, más grande que su antecesor, y encontrar una posición de manejo cómoda es fácil gracias a las múltiples regulaciones de volante y asiento. En las plazas traseras, el espacio para las piernas se ha incrementado en 45 mm, mientras que la altura permite tener 8 mm adicionales para la cabeza, con lo que personas altas no tienen problemas de habitabilidad.
Los asientos traseros son rebatibles con el esquema 60/40 y el baúl, en el que encontramos una rueda de auxilio de igual tamaño y con llanta de aleación, tiene una capacidad de 288 litros.
Del equipamiento de la única versión que se comercializa del Río en Argentina destacamos el completo volante multifunción, el control de velocidad crucero, todos los elementos que hacen a la conectividad (Bluetooth, puertos para iPod y USB, etc.) los alzacristales eléctricos en las cuatro puertas, los espejos eléctricos calefaccionados, el cierre centralizado, el techo solar eléctrico, la apertura interna del tanque de combustible y la gran guantera refrigerada con capacidad de 15 litros, además del “Shift Gear Indicator”, el valioso indicador de cambio ideal que colabora en el ahorro de combustible.
Todos estos elementos completan un equipamiento que está muy bien pero acusa algunos faltantes en relación a las versiones más equipados de la competencia. Por ejemplo, una pantalla táctil color, GPS, acceso y botón de arranque sin llave, sensores de estacionamiento, tapizados de cuero, son elementos que están disponibles en el Rio en otros mercados y que sería deseable que lleguen, al menos en un nivel de equipamiento superior.
Seguridad
El Kia Rio incorpora todos los elementos que serán obligatorios en nuestro país a partir del año próximo: airbag para conductor y acompañante y ABS. Además agrega frenos a disco en las 4 ruedas (ventilados adelante y sólidos atrás), algo que es inédito en el segmento.
También están presentes el anclaje ISOFIX para sillas infantiles, luces antiniebla y spoiler trasero con tercera luz de stop, pero no encontramos apoyacabezas y cinturón inercial para la quinta plaza.
En otros mercado se ofrece con airbags laterales y control de estabilidad (ESP) para redondear 5 estrellas EuroNCAP de seguridad, aunque estos elementos no están disponibles en la versión que llega al país.
Performance
El motor de esta tercera generación del Kia Rio es un cuatro cilindros naftero de 1.4 litros que desarrolla una potencia máxima de 109 CV a 6.300 rpm y un torque de 137 Nm a 4.200 rpm. Está asociado, en el caso de la unidad probada, a una transmisión manual de 6 velocidades, un equipamiento muy valorado que favorece el consumo y que no es habitual en nuestras latitudes, inclusive en segmentos superiores al del Rio.
Esta pequeña mecánica no tiene inconvenientes para mover con mucha soltura los 1.141 kilogramos del compacto de Kia, que muestra valores de performance más que dignos con un 0 a 100 km/h de 11,7 segundos, un cuarto de milla (0 – 400 mts) de 17,7 segundos (a 124 km/h), recuperos en 4ta velocidad de 80 a 120 km/h en menos de 12 segundos y una velocidad máxima de 182 km/h.
Con muy buen feeling en el pedal de freno, el Rio responde bien con algo más de 41 metros para detenerse sin perder la trayectoria de 100 km/h a 0.
Pasando a los consumos, que es otro de los puntos fuertes del modelo, circulando a 100 km/h en 6ta marcha a 2.800 rpm gastamos 5,2 litros para recorrer 100 kilómetros. A 120 km/h (3.400 rpm) el consumo se eleva a 6,4 l/100 km, en tanto que a 130 km/h (3.700 rpm) trepa hasta los 7,2 l/100 km. En la ciudad, por su parte, le alcanzan con 7,5 litros para hacer los 100 km.
El tanque de combustible es de 43 litros, algo limitado, pero compensa muy bien con su bajo consumo logrando una autonomía más que aceptable.
* A 100 km/h la velocidad real es de 97 km/h, con un error de velocímetro de 3% que se mantiene constante.
Ficha técnica y equipamiento
Dinámica
El Rio es uno de esos autos equilibrados que gracias a (y a pesar de) sus contenidas dimensiones es ágil para el manejo trabado en la ciudad, pero a la vez es solvente para viajar de manera cómoda y segura en la ruta. En esto colabora la dirección eléctrica progresiva, que junto a un reducido radio de giro, hacen que las maniobras trabadas sean fácil de resolver.
Las suspensiones Mc Pherson, se muestran algo “duritas” para encarar las castigadas calles de Buenos Aires pero favorecen el comportamiento dinámico en circuitos más veloces, en los que el Rio se muestra estable, con una leve tendencia subvirante.
La caja de seis velocidades, nos permite viajar con el motor relajado favoreciendo el confort de marcha y la insonorización interior, que ya de por sí es excelente.
Conclusiones
El Kia Rio se ofrece en Argentina a un precio de U$S 24.300 que al tipo de cambio actual se convierten en unos $140.000. Está disponible en colores clear white, bright silver, platinum graphite, signal red, aurora black y forma deep blue y está respaldado por una garantía de 5 años o 100.000 km, una política para aplaudir de la marca coreana.
Es una pena que en nuestro país se penalice este tipo de productos “extrazona” (el Rio llega desde Corea) con un impuesto del 35,5%, que eleva su precio un poco por encima del de sus rivales mercosur (Fiesta, Sonic, 208, C3, Punto, entre otros). Así y todo, este muy buen producto de Kia es una excelente alternativa para aquellos que pueden pagar algunos pocos pesos adicionales por un producto muy bien logrado que con su diseño y calidad, tiene argumentos sólidos para dar pelea.
Destacable: diseño, calidad de materiales y terminaciones, caja de 6ta (conjunto motor / transmisión), dirección, auxilio homogéneo, garantía de 5 años.
Mejorable: algunos faltantes de equipamiento de confort y seguridad, visibilidad trasera, capacidad del tanque de combustible, precio.
Fotos y textos: Ezequiel Herraiz
