Además de incorporar retoques estéticos a su intimidante exterior, el deportivo alemán incrementó la potencia hasta los ¡310 caballos! Cajas manual o automática y tracción integral.

Volkswagen continúa renovando la gama del Golf. Ahora dio a conocer la actualización de la variante más extrema, la R, que se diferencia del resto de la familia por estética, potencia y prestaciones.

Lo primero que llama la atención del modelo es la renovación que ha experimentado el exterior, donde cuenta con un frontal con nuevas ópticas (cambiaron internamente) y nuevo paragolpes, siempre manteniendo el estilo deportivo del modelo.

Los cambios se extendieron a los laterales, donde cuenta con nuevas llantas de aleación que, como las anteriores, le brindan carácter deportivo y dejan ver el generoso sistema de frenos.

En la parte trasera, el modelo se luce con el spoiler integrado a la luneta, las ópticas con nuevo interior y el flamante paragolpes, el cual incluye difusor y se combina con las cuatro salidas de escape, lo que completa un conjunto muy interesante.

Las carrocerías mostradas hasta el momento son la hatchback con tres puertas y la Variant, la opción familiar del Golf. La gama anterior del modelo también tenía una hatchback con cinco puertas.

Por su parte, la mecánica está conformada por el motor 2.0 TSI, un naftero con inyección directa e indirecta, turbo e intercooler, que en la gama 2017 ha sido optimizado para rendir aún más, llegando a los 310 caballos de potencia (antes tenía 300) y a los 400 Nm de torque (antes 380).

Está acompañado por las cajas manual o automática DSG con doble embrague, ambas con seis velocidades. Además, la tracción es integral permanente, mientras que la aceleración de 0 a 100 km/h es de 4,6 segundos.

Ahora sólo resta conocer el interior, el cual debería sumarse a los cambios de la gama, que ahora puede incluir control de gestos y tablero totalmente digital y configurable, con pantalla de 12,3 pulgadas.