Luego de varios anticipos, Hyundai finalmente presentó su nuevo SUV compacto Kona, que amplía la familia actual compuesta por Creta, Tucson, Santa Fe y Grand Santa Fe. El nuevo modelo saldrá a la venta en Corea a finales de este mes, luego en Norteamérica y Europa y llegaría a nuestro país a fines de 2018.
Revelado por completo, el diseño del Hyundai Kona no pasa desapercibido por la originalidad de sus líneas, que incluyen un frente con una parrilla hexagonal de grandes dimensiones y tres conjuntos de luces: uno superior con diurnas de LED, uno central para las principales y uno inferior destinado a las antiniebla.
Las luces principales además se unen con los apliques plásticos presentes en los guardabarros. Además, en los laterales se lucen tanto el parante trasero como el techo de otro color y con estilo “flotante”. Esta nueva imagen proyecta la futura dirección de diseño de la próxima generación de modelos SUV de la marca.
Las características del exterior continúan dentro del vehículo, con una línea de carácter horizontal que crea una sensación de amplitud. Incluso con sus dimensiones compactas y su línea de techo bajo, el SUV ofrece el mejor espacio en su segmento, aseguran desde Hyundai.
El nuevo modelo está equipado con un nuevo sistema de información y entretenimiento con varias opciones de conectividad, incluyendo Android Auto y Apple CarPlay, dentro de una pantalla de 5, 7 u 8 pulgadas según versión. Otras opciones incluyen radio digital DAB (Europa), HD Radio (Norteamérica), visualización de la cámara de visión trasera y 4G (Norteamérica) para asegurar la conectividad.
También incorpora un nuevo Head-Up Display (HUD) que proyecta una imagen virtual en el panel de vidrio transparente montado detrás del panel de instrumentos para permitir al conductor a mantener sus ojos en la conducción. Además, cuenta con carga inalámbrica de teléfonos inteligentes.
El nuevo SUV se ofrece con un abanico de motores nafteros y diésel. La oferta incluye un 2.0 litros MPI naftero de 149 CV y 179 Nm, capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 10 segundos y alcanzar 194 km/h, en sociedad con la caja de cambios automática de seis velocidades.
La gama cuenta también con el 1.6T-GDI de 177 CV y 265 Nm, junto a una transmisión automática de doble embrague y siete velocidades que le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en 7,7 segundos y alcanzar los 210 km/h.
Adicionalmente, en Europa estará disponible el 1.0 T-GDI turbo de tres cilindros (120 CV y 172 Nm), junto a una caja de cambios manual de seis marchas y se ofrecerá también el motor diésel 1.6 para algunos mercados.
Todos poseen tres modos de conducción (Sport, Normal y Eco) que modifican la distribución del par motor y los ajustes del cambio de marchas. De esta manera, en el modo Sport se hace foco en la aceleración y la potencia, en tanto que el modo Eco optimiza la economía de combustible sobre el rendimiento.
Respecto de la seguridad, el marco de la carrocería se ha desarrollado con acero de alta resistencia avanzado de 51,8% para ofrecer niveles de seguridad pasiva elevados. La plataforma cuenta además con una estructura con una novedosa tecnología de dispersión de energía para proteger a los pasajeros en caso de accidente.
El listado de dispositivos de seguridad activa incluyen la ayuda frontal para evitar una colisión (FCA), que utiliza la cámara delantera y el radar del vehículo para detectar un choque inminente y evitar el impacto o minimizar el daño al frenar de forma autónoma. Otros tres sistemas también utilizan la cámara frontal para aumentar la seguridad: Lane Keeping Assist (LKA); High Beam Assist (HBA); y la Advertencia de Atención del Controlador (DAW).