Luego de su arribo al mercado argentino, el Jeep Wrangler sumó en Estados Unidos el 4xe, la variante ecológica con motorización híbrida enchufable, que se suma a las versiones con motores naftero y diésel ofrecidas en el país norteamericano.
El primer Wrangler electrificado (como los Compass 4xe y Renegade 4xe) cuenta con un estilo exclusivo gracias a la incorporación del color azul en diferentes piezas del exterior (como los ganchos de remolque) y en el habitáculo. Está disponible con las variantes 4xe, Sahara 4xe y Rubicon 4xe.
La nueva motorización posee tres motores, el naftero 2.0 turbo con inyección directa y dos eléctricos delanteros. Uno de ellos reemplaza al alternador, mientras que el otro hace lo mismo con el convertidor de par. Juntos, los motores generan 381 caballos y 637 Nm de torque.
La mecánica también incluye la caja automática con ocho marchas y dos sistemas 4×4 con reductora: permanente con diferencial trasero de deslizamiento limitado para los 4xe y Sahara 4xe, y 4×4 Rock-Trac con bloqueo eléctrico de diferenciales delantero y trasero y desconexión eléctrica de barra estabilizadora para el Rubicon 4xe, que se luce en las imágenes.
El nuevo Wrangler 4xe además incorpora los modos Híbrido, Eléctrico (EV) y eSave, además de frenado regenerativo. Por su parte, las baterías de iones de litio están bajo la segunda fila de asientos y permiten recorrer 40 kilómetros sólo con energía eléctrica. El consumo de nafta es de aproximadamente 4,7 l/100 km.
En su versión electrificada, el todoterreno de Jeep continúa destacándose por sus aptitudes para salir del asfalto. Como las versiones convencionales, incluye ejes rígidos, neumáticos todo terreno, 76 centímetros de capacidad de vadeo y controles de ascenso y de descenso en pendiente.
El Wrangler 4xe será parte de la gama del modelo en Estados Unidos (donde será producido), China y Europa a partir de comienzos de 2021. La marca de FCA aún no lo anunció para Sudamérica.